En un artículo hemos mencionado la importancia de la práctica de las diferentes técnicas de defensa. Acá vamos a ver 3 ejemplos de quites y sus puntos más esenciales para poder practicarlos y/o enseñarlos con mayor información.
El quite corredizo con una mano:
En esta imagen podemos ver una buena posición y ejecución de este tipo de quite. El jugador de azul está agachado, con los dedos en contacto con el suelo y con la cara plana del palo extendida en su totalidad.
Está buscando hacer que el rival no tenga manera de escapar ya que se está encontrando con un “muro”. Para ejecutar este quite necesitamos una postura bien baja, que nos permita “acostar” el palo en el suelo.
Tenemos que tener en cuenta que este quite se hace cuando podemos leer que el rival tomó una decisión de avanzar y la distancia se acorta. También debemos tener en cuenta que el rival se haya comprometido a ejecutar un regate por el suelo, ya que, si acostamos el palo demasiado temprano y con distancia, el contrario puede levantar la bocha y así saltar el quite.
El quite corredizo con dos manos
Similar al quite corredizo con una mano, el quite a dos manos se realiza cuando podemos leer que el rival se comprometió a hacer una eliminación por tierra. Para esto ambas manos están en contacto con el suelo.
Este es un quite muy eficiente cuando la distancia con el atacante de se achica mucho, ya que el alcance va a ser menor en cuanto a la distancia, pero la fuerza que uno puede ejercer al robar la bocha, es alta.
También existe el riesgo que el rival haga un “salta-pelotitas”, pero al tener el palo en las dos manos y con un espacio cerrado, podemos elevar la mano izquierda y mover la derecha, lo cual nos permitirá ponerlo de forma más vertical para evitar que el contrario nos gane.
El quite de corredizo de revés
En los dos ejemplos anteriores vimos a un contrario que nos ataca para el lado derecho de nuestro quite. Entonces, ¿cómo podemos hacer para quitar por izquierda?
Aquí vemos un quite de revés, con la cara plana del palo enfrentando a la pelota y con una toma de una mano bien estirada. El pie que va adelante es el izquierdo, lo cual nos permite tener un alcance bien largo.
En este caso el quite se realiza con la mano izquierda elevada ya que el defensor seguramente hizo una buena lectura y consideró que podía robarla así. También podemos realizarlo con la mano izquierda totalmente apoyada en la cancha, lo cual nos dará mayor alcance y superficie de contacto.
De todas maneras, al igual que los quites de derecho, lo esencial es el “timing” de la jugada. Debemos hacer una buena lectura de lo que el atacante va a realizar para evitar pasar de largo o cometer una falta innecesaria.
Veamos los quites en acción:
Espero que estos 3 ejemplos les puedan servir para practicar y aplicar con sus jugadores. Estoy seguro que la recuperación y defensa va a mejorar en la medida que entrenemos la parte defensiva con el interés que merece.